top of page

Tiempo Astral 2023: Observando desde la posición privilegiada

Inicia la primera temporada de eclipses del 2023. Estás redefiniendo qué personaje quieres escenificar ahora, para reconectar con tu vocación y talentos.



Estás navegando una temporada de eclipses, y esto tiene efectos en tu cuerpo. Es común que experimentes dolores de cabeza, estados de confusión, ansiedad, insomnio, e incluso mayor cansancio mental y físico. ¿Has notado en ti mayor agotamiento, o «niebla mental»?


La «resistencia» a los cambios es la que produce tus dolencias.


Me gusta imaginar a los eclipses como una «ventana» hacia otra dimensión; algunas personas apasionadas por la Astrología los llaman «portales». De cualquier forma, imagina que esta apertura hacia otra realidad se te presenta como emisora de luz en un momento de mucha oscuridad.


Sin embargo, en medio de la penumbra, tanta luz proveniente de dicho portal es cegadora. Te deslumbra de tal manera que no puedes observar tampoco lo que te espera del otro lado si decidieras cruzarlo. ¿Cómo saber que lo que te está más allá de esta puerta es mejor que lo que experimentas en la actualidad? Podrías quedarte en la oscuridad, con la esperanza de que en algún momento se encienda alguna luminaria.


Pero cuando se han «ocultado» tus habituales fuentes de luz, tu yo humano, atado a la Tierra, busca recuperarla a como dé lugar. La mejor opción es arriesgarse, y de allí el consenso astrológico acerca de los eclipses como eventos que aceleran cambios en tu vida. Una vez que atraviesas el portal que supone una temporada de eclipses, las modificaciones que ocurran son irreversibles.


En otras palabras, las temporadas de eclipses resultan un período de crisis multidimensional. Es por eso que el gasto energético es mayor, y requieres disminuir o suprimir aquellas actividades, alimentos o pensamientos que te alejan de un estado de equilibrio espiritual, físico y mental.


Así que un eclipse es una experiencia de «alineación» con aquello que está escrito en tu Carta Natal. El maestro Tito Maciá la llama la «partitura del cielo»; y por eso hay personas que nos dedicamos a «leerla».


La trama nodal


Como los eclipses ocurren cerca de los nodos lunares, el eje de intersección entre la órbita de la Luna (alma) y la que sigue la Tierra alrededor del Sol (consciencia), son portales donde el universo te trae (Nodo Norte) y depura (Nodo Sur) experiencias y personas en tu vida para tu evolución.


El Nodo Norte es el punto en donde la órbita de la Luna se eleva por encima de la eclíptica u órbita de la Tierra alrededor del Sol. El Nodo Sur, lo contrario; el punto en donde la órbita de la Luna se ubica por debajo de la eclíptica.


El Nodo Norte ha sido reconocido tradicionalmente como «Caput Draconis», «Rahu» o «Cabeza del Dragón». Tiene que ver con tu sentido de encarnación; la energía que te llama el universo a manifestar, y por ello sincroniza con la naturaleza benéfica de Júpiter.


Por el contrario, al Nodo Sur se le denomina «Caitda Draconis», «Ketu» o «Cola del Dragón». Está asociado a la energía de Saturno, y representa las lecciones y talentos que ya has aprendido en una vida anterior. Aunque en este plano la maestría que refleje el Nodo Sur puede servirte de apoyo para acercarte a tu propósito, es ideal desarrollar las experiencias que estén vinculadas a la ubicación del Nodo Norte en tu Carta Natal, según el signo y la casa que ocupe.


No obstante, los puntos de intersección entre la órbita lunar y terrestre se mueven progresivamente hacia atrás en la rueda Zodiacal (en retrogradación), y su estadía en cada axis o eje zodiacal (dos signos opuestos entre sí) tiene una duración aproximadamente de un año y medio. Por lo tanto, su travesía por todos los axis del Zodíaco culmina en un tiempo de 18 años y siete meses.


Los 12 signos se agrupan en 6 «axis zodiacales» o «ejes zodiacales», cada uno compuesto por 2 signos en oposición de 180°: Aries-Libra, Tauro-Escorpio, Géminis-Sagitario, Cáncer-Capricornio, Leo-Acuario, Virgo-Piscis. Si quieres conocer más sobre los ejes zodiacales, te invito a leer esta publicación en Instagram.


Ahora bien, esta primera serie de abril-mayo es particular porque representa un híbrido entre las lecciones cósmicas del eje nodal Tauro-Escorpio, activo desde el 18 de enero de 2022; y el de Aries-Libra, a partir del 17 de julio de 2023. Ahora te cuento sobre este escenario.


El escenario astral de este año


Llamo a la temporada de eclipses «escenario», porque representa el #tiempoastral en el que los personajes, tú y otras personas, desplegarán el «guión» del Maestro. Así que resulta tal cual un «tiempo», confusamente a veces declarado como «clima», en el que diálogos y acciones se desarrollan.


En efecto, Judy Hall (2005) explica que «durante los eclipses, la luz de la consciencia (el Sol) queda bloqueada, y las fuerzas subconscientes y colectivas (la Luna) pueden salir a la superficie, o bien la consciencia racional (el Sol) supera la irracional (la Luna). Así, el eclipse puede ser un momento en que las energías reprimidas estallan con gran fuerza, y las actitudes enraizadas y el karma, sea personal o colectivo, quedan liberados».


Dicho esto, cabe aclarar que cada año experimentas dos temporadas, de por lo menos dos eventos en cada una, y a veces tres; mas cada eclipse tiene una configuración inédita, en grados y aspectos que se forman entre planetas y otros elementos en tu Carta Natal.


Este año, ocurrirán dos eclipses en el axis fijo (desarrollo) de Tauro-Escorpio (valor propio y compartido); y otros dos, en el axis cardinal (inicios) de Aries-Libra (individualidad y relaciones):



Primera temporada de eclipses

06-ABR: Luna Llena en Libra | Inicio 20-ABR: Eclipse solar híbrido en Aries 05-MAY: Eclipse lunar penumbral en Escorpio 19-MAY: Luna Nueva en Tauro | Fin


Segunda temporada de eclipses

29-SEP: Luna Llena en Aries | Inicio 14-OCT: Eclipse solar anular en Libra 28-OCT: Eclipse lunar parcial en Tauro 13-NOV: Luna Nueva en Escorpio | Fin



Con el cambio del eje nodal a Aries-Libra, el 2023 es un año de grandes comienzos y proyectos de naturaleza personal, que tienen que ver directamente con lo que «eres» esencialmente; mientras terminas de sanar temas del eje nodal Tauro-Escorpio, o la manera en que «intercambias» valor con el mundo. Ahora te cuento sobre el primer eclipse.


La primera escena cósmica


Al respecto del primer eclipse solar híbrido en Aries del 20 de abril, sentirás con mucha más fuerza la necesidad de depurar tus relaciones; más aún considerando que esta primera temporada de eclipses inició con la Luna Llena en Libra del 06 de abril, el signo vinculado a las asociaciones con pares. Para vivir una vida auténtica necesitas tomar decisiones que no nazcan de la reactividad tuya o de otros, sino de un examen justo en donde tu mente y corazón encuentren consenso acerca de qué quieres para ti ahora, «independientemente de lo que tú creas que quieren los demás para ti».


Así que, en la «conquista» de un nuevo espacio, se verá eclipsada una parte de ti.


El juego de luces entre el Sol y la Luna intensificará los anhelos de tu alma, y ensombrecerá un aspecto de tu ego que actualmente te limita para encarnar una versión más actualizada de ti. Este evento lunar, y los consiguientes en el eje Aries-Libra, serán ventanas energéticas para redefinir qué personaje quieres escenificar ahora, y para reconectar con tu vocación y talentos.


Desde el palco


Ahora bien, ante el gasto energético que implica atravesar una temporada de eclipses, puedes dejar que suene la música de la «partitura del cielo», y confiar.


Por eso quiero pedirte que hagas el ejercicio de disociarte de tu rol protagónico en esta trama nodal; quiero pedirte que observes, más bien «desde el palco», las situaciones con las que los eclipses sincronizan en tu vida.


Para ello te cuento sobre una última cosa. Se trata de una herramienta que utilizo en mis sesiones de coaching con las personas con las que trabajo, y que te permitirá adquirir un nuevo ángulo desde el cual observar cualquier situación, potenciadora o limitante, que se te presente en esta temporada de eclipses.


Se trata de la «metaposición», que forma parte del conjunto de posiciones perceptivas con las que cuenta la Programación Neurolingüística (PNL) para que las personas experimenten situaciones del presente, pasado o futuro, desde distintas perspectivas, y hasta lograr una mirada global.


La primera posición es la del «yo», que experimentas de manera subjetiva en primera persona. En temporada de eclipses esta es la mirada que con mayor probabilidad puede limitarte, porque en ella experimentas el apego a las condiciones iniciales que se verán inevitablemente modificadas por los efectos de los eventos astrológicos y, con mayor intensidad, todas las sensaciones y emociones que estos susciten en tu interior.


La segunda posición se trata de la «otredad», el ángulo de la(s) otra(s) persona(s) involucrada(s) en una situación. Cuando experimentas un acontecimiento desde el punto de vista de otra(s) persona(s), y te disocias simbólicamente del tuyo propio, puedes desarrollar tu empatía y capacidad para conectar con las demás personas. Asimismo, puedes identificar y valorar elementos de tu comunicación desde la primera posición que en un rol protagónico no eres capaz de advertir. Esta posición es análoga a hablar contigo frente al espejo, pero siendo tu reflejo otro ser humano escenificado por ti.


La tercera posición corresponde al rol de «quien observa». Se trata de una persona que atestigua de manera objetiva y sin involucrarse emocionalmente con lo que ocurre en una situación. Desde ese lugar puedes observar y valorar las interacciones entre la(s) persona(s) que asume(n) la primera y segunda posición. Es una posición desde donde puedes mediar, asesorar, guiar.


Por último, la «metaposición», o la posición de la persona que observa de manera omnisciente. Esta es una posición en donde puedes dejar pasar pensamientos, sensaciones y emociones, interacciones y acontecimientos, como si se tratara de la vida de la persona que encarna la primera posición; confiando que todo cuanto ocurra es para evolución de esa persona (tu «yo»).


Con esto me refiero a que es una posición privilegiada, en donde puedes integrar las valoraciones que emergen desde la primera posición, la segunda y la tercera; evitando atribuirle la categoría de buenas y malas, o correctas o incorrectas a dichas apreciaciones. Parece imposible y, sin embargo, a través de la meditación disciplinada es realizable.


Dicho esto, te invito a que en un espacio seguro, de encuentro contigo, cierres los ojos y te imagines en una situación que vivencias como limitante en esta temporada de eclipses. Cuando hayas logrado visualizarla con lujo de detalles, haz el ejercicio de asociarte a cada una de las posiciones que te mencioné anteriormente, y en ese orden, hasta llegar a la «metaposición». En el camino, observa los cambios que se producen en la situación cada vez que cambies de perspectiva.


Si quieres hacer este ejercicio con mi guía y acompañamiento, cuéntamelo aquí.


La «metaposición» te permitirá encontrar la luz en medio de la penumbra que suscita cualquier temporada de eclipses, al desarrollar la capacidad de reconocer y aceptar el «carácter de realidad» que tienen las cosas en tu universo; como «son», y no como aspiras que «sean». Nada o nadie desplegará mejor los anhelos de tu alma que el reloj del universo, representados en tu Carta Natal. Para vivir no hace falta más que escuchar su tic, tac, tic, tac...


Cualquier temporada de eclipses es un período adecuado para conservar tu energía, procurar tu descanso, espacios para la contemplación, y la quietud que antecede a cada inicio de ciclo. Cuando culmine esta primera temporada, podrás recuperar tu poder personal, y liderar tu vida con más y mejores recursos, procurados por el «arquitecto universal» a través de sus portales.


Gracias por confiar en la música del universo.


Un abrazo, Astrid

Kommentare


Astrid Astrocoach 11.jpg

Hola, soy Astrid.

Conecto a otras personas con los recursos que necesitan para lograr sus propósitos, a través de conversaciones desafiantes.

 

En el camino, me he convencido de que el primer paso hacia una vida satisfactoria es comenzar a definirnos por lo que somos, y no por lo que hacemos o tenemos.

De hecho, me apasiona pensar que ejercitar el músculo de la reinterpretación es lo que nos permite cambiar de rumbo cuando así lo deseemos.

 

En mi propio viaje de descubrir, experimentar y evolucionar como ser humano, van surgiendo algunas reflexiones que deseo compartirte en este mismo espacio.

Archivo

Etiquetas

bottom of page